El tío
Entonces ¿Cómo afrontan los grupos oprimidos la situación colonial? En un contexto en el que el sistema socio-económico tradicional basa su funcionamiento en relaciones de reciprocidad en las que predomina el valor de uso de los objetos y de las prácticas humanas, la introducción del sistema mercantil se convierte en un factor de destrucción y miseria. Después de vivir en abundancia y con relativa autonomía, encontrarse obligado a trabajar por un salario es equivalente a perder la propia alma. Para subsistir es necesario hacer un pacto con el demonio en el que se entrega el alma a cambio de mayor productividad. Sin embargo, el dinero obtenido de esta forma sólo puede ser despilfarrado en lujos y gastos innecesarios, pues el pacto con el diablo hace que todo sea infértil, envejeciendo a los hombres y erosionando la tierra. La vida misma se convierte en una mercancía, dependiendo únicamente de su valor de cambio en el mercado... ¿Cómo resistir?
Descargue "El diablo y el fetichismo de la mercancía en Sudamérica" de Michael Taussig: